
Todo comenzó con un encuentro promovido por el Papa Juan Pablo II en 1984.Fue un encuentro de amor, soñado por Dios y abrazado por los jóvenes.
Voces que necesitaban ser escuchadas y un corazón listo para acogerlas.
La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), como fue denominada a partir de 1985, continúa a mostrar al mundo el testimonio de una fe viva, transformadora y a mostrar el rostro de Cristo en cada joven.
Son ellos, los jóvenes, los...